El uso continuo del móvil conlleva peligros para la salud, tanto para los adultos como, en mayor medida, para los menores. David Carpenter, director del instituto de salud y medio ambiente en la universidad de Albany, en Nueva York y Ronald Herberman, director del instituto de cáncer en la universidad de Pittsburgh (Pensilvania), dijeron a la Comisión de Reforma de la Cámara de Representantes en EEUU que el riesgo de cáncer cerebral por el uso del móvil es bastante más grande para los niños que para los adultos, pues la radiación de un móvil penetra más profundamente en el cerebro de un niño de 5 años que en un adulto. «Cada niño usa un móvil todo el tiempo, y hay 3.000 millones de usuarios de móvil en el mundo»,según Herberman.
Aunque los estudios realizados hasta ahora no concluyen de manera tajante una relación directa entre telefonía móvil y la aparición de tumores, los científicos estadounidenses citaron trabajos europeos, en particular de Escandinavia -cuna del móvil-, que muestran un vínculo entre el uso frecuente del móvil y tumores benignos y cancerosos. Una reciente investigación sueca del científico Lennart Hardell afirma que un usuario regular tiene dos veces más riesgos de desarrollar un tumor en el nervio auditivo del lado donde utiliza el aparato, que en el lado que no usa.